Dijo Trump: “Para lograr un progreso real en seguridad pública primero tenemos que romper los viejos patrones que siempre llevaron al fracaso. Muchos de los políticos que ahora se presentan como la solución son los mismos que durante décadas le han fallado a las escuelas, al trabajo, a la justicia y a la lucha contra el crimen”.
Y esa ha sido la base de Trump desde el momento que se anunció como candidato presidencial, romper con todo Status Quo, él sabe que no se puede lograr resultados diferentes si sigues usando las mismas fórmulas, y que no puedes usar nuevas fórmulas si aún eres influenciado por las antiguas. Por eso es tan odiado hasta por gente de su mismo partido, viejos camajanes enquistados en sus sillas políticas por generaciones. ¿No se han fijado como Trump siempre termina teniendo problemas con esos dinosaurios que equivocadamente les dio un puesto en su administración?, los enemigos de Trump se alegran ante esa situación y la presentan como que hay un gran descontrol en la Casa Blanca cuando en realidad significa exactamente lo contrario, en la Casa Blanca hay un líder que sabe lo que quiere y cómo hacerlo para lograr los resultados prometidos sin importarle como luce en el camino, 100% lo opuesto a la administración anterior.