
Maquiavelo lo tenía bien claro. El humano es malo por naturaleza, y esa es la maldad que saben utilizar y manipular muy bien los líderes izquierdistas/socialistas. Su secreto está en azuzar y sacar a flote los más bajos sentimientos humanos, desde la envidia para denunciar al vecino, hasta el miedo para agachar la cabeza.